Un galpón escondido en el fondo de una vivienda del Pasaje Einstein al 1.800, barrio 11 de Marzo, servía como guarida y depósito de una banda que se dedicada a robar y adulterar datos de motos para luego venderlas en el mercado. Tras una larga investigación y un importante operativo llevado a cabo durante el sábado, la Policía logró desbaratar el grupo, informó el Gobierno provincial.
"En el marco de un importante allanamiento que se realizó en la tarde del sábado en el Barrio 11 de Marzo de la Capital, los efectivos de la División Sustracción de Automotores de la Policía lograron desarticular una banda dedicada a adulterar motos que habían sido robadas en distintos puntos de la provincia e incluso en otras jurisdicciones, como Santa Fe", detalla el comunicado firmado por la Secretaría de Comunicación Pública de Tucumán.
“Se desarticuló una banda que se dedica a obtener motos robadas para luego adulterar su número y documentación con la intención de insertarlas ilegalmente en el mercado, estafando de esta manera a las personas que las compran de buena fe”, señaló el director de Investigaciones de la Policía, Jorge Dib, quien supervisó la medida junto al jefe de la División Sustracción de Automotores, Walter Salvatierra.
Como resultado del procedimiento, en el galpón se secuestraron cuatro motos (tres robadas y una con numeración adulterada), cúneos, tornos, moldes, sellos, computadoras e impresoras. “Son elementos que se usan para la falsificación de documentación y que evidencian la actividad ilegal que desarrollan”, acotó Dib.
“Es una banda bien organizada que tiene un alto nivel de calidad en la adulteración de los números y documentaciones, muy difícil de detectar. Se encargan de borrar el número original y le ponen uno nuevo para que el vehículo no tenga impedimentos para circular. Pero, muchas veces, se detectan las falsificaciones en los controles rutinarios y los nuevos dueños de las motos recién se dan cuenta que fueron estafados”, sostuvo el comisario.
La investigación policial y judicial continúa para dar con los sospechosos que no se encontraban en el galpón en el momento del allanamiento. Además, los investigadores sospechan que esta causa estaría vinculada con otras en las que se secuestraron motos robadas.
La causa está en manos de la fiscal Especializada en Robos y Hurtos de la III Nominación, Adriana Reinoso Cuello.